Gimenells no es un pueblo catalán como los demás. Inaugurado en 1947 gracias al Instituto de Colonización Agrícola, aquí se establecieron colonos de toda España llegados desde Andalucía, Extremadura y Aragón. Ochenta años después, los nietos de este ‘pueblo de Franco’ hablan catalán.
La sociología de Gimenells ha convertido a este pueblo en una especie de laboratorio de la política del futuro. De orígenes franquistas, los hijos de los colonos han ido integrando las diferencias para convertirlas en anécdota de banderilla y vermut. Aquí gobernó el primer alcalde de España por Ciudadanos (el partido de moda ahora), pero en las últimas elecciones catalanas el voto independentista casi se impone. La rareza de este pueblo es tal, que ha merecido la atención de diarios alemanes como el Die Welt o la mirada del colectivo madrileño NOPHOTO.org que tutelaron un taller de fotografía entre los aldeanos. Parte del resultado de este taller son las fotos que ilustran este reportaje.
